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Desde hace varios años la depilación láser es un método ampliamente usado para eliminar el vello corporal. Decirle adiós a los vellitos de las axilas, rostro, piernas o zona íntima es una oferta tentadora para muchas. El procedimiento y los equipos han evolucionado con el tiempo y hoy se ofrecen tratamientos más seguros y efectivos.
Como siempre, el primer consejo será ponerte en manos expertas para someterte al láser. Esta técnica de depilación requiere de un profesional de la dermatología para su aplicación. No dejarse engañar por ofertas o promociones en sitios de dudosa calidad es muy importante. El tratamiento láser siempre será mucho más costoso que otras depilaciones y practicado por especialistas certificados. De esta manera se garantiza que el proceso sea eficaz y sin complicaciones.
Sin embargo, como con cualquier procedimiento estético o médico, el cuidado posterior es fundamental. Si ya decidiste depilarte con láser es bueno que sigas algunas recomendaciones para que garantices el efecto. También, para que tu piel no sufra más de lo debido.
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Cuando te sometes a la depilación láser la piel tratada se torna más sensible. Esta queda desprotegida y por ello hay que cuidar lo que aplicamos sobre ella. Por ejemplo, no se recomienda que uses perfume en las zonas tratadas. Igualmente, aquellos productos que contienen fragancias o alcohol, como desodorantes o cremas. Algunos pacientes señalan que en su lugar aplican aloe vera, pero lo ideal es seguir las indicaciones del profesional.
Tampoco se aconseja que inmediatamente después, o durante la primera semana se realice una exfoliación. Los productos pueden resultar abrasivos y contraproducentes. Lo mejor será esperar para volver a la rutina y solo lavar e hidratar la piel tratada. Ahora, lo que sí es aconsejable es exfoliar un par de días antes del tratamiento láser la zona a depilar. Esto ayuda a desobstruir los peros y liberar los vellitos que puedan estar enterrados.
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Igualmente, hay que ser muy cuidadosas con la rutina de cuidado diario que se emplea. Algunas usamos productos químicos como el retinol, ácido salicílico o el ácido glicólico en el proceso de “skincare”. Estos resultan irritantes para una piel que se ha tratado con láser. Lo ideal es que se suspendan estos productos una semana antes y semana después de la depilación.
Otra advertencia de los dermatólogos es cuidarse del sol. Luego de la depilación hay que evitar exponerse directamente a los rayos UV. Hacerlo puede irritar o manchar el área. Lo mejor será cubrirla y aplicar protector solar a diario por al menos una semana.
