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Ya lo sabemos, el tiempo no perdona. Sin importar el tamaño de los senos, el paso de los años hace que pierdan firmeza y se comiencen a caer. Se trata de un proceso natural que implica una debilidad en las fibras de colágeno que los sostienen más la suma de la gravedad. Pero esa flacidez puede controlarse y combatirse.
Lo principal es entender qué acelera la flacidez de los senos. Las causas están relacionadas con el estilo de vida. Cuando se baja o aumenta de peso de forma drástica la piel de los senos se ve afectada. Estos no pueden adaptarse tan rápido al cambio corporal y se caen. Otros factores dañinos para los senos son tener una postura incorrecta, exponerse demasiado al sol, la maternidad y lactancia; y usar sujetadores de talla incorrecta.
Son varios los tips que puedes emplear para combatir la flacidez y mejorar la firmeza de los senos. Alimentación, ejercicios y hábitos son la clave. No es un secreto que enfocarse en la salud integral de nuestro cuerpo repercutirá en cada parte de él. Hay que cuidarse y nunca es tarde para empezar.

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Aunque no hay recetas milagrosas, si hay ciertos remedios caseros que ayudan. Para tener unos senos hermosos hay infusiones que podemos preparar en casa y sorprendernos con los resultados. Se trata de las llamadas “infusiones de fitoestrógenos”. Estos contienen un estrógeno natural que contienen ciertas plantas, alimentos y vegetales que embellecen los senos.
Los fitoestrógenos realizan una función similar la hormona femenina responsable de que los senos crezcan. En este caso, su consumo hará que se vean más redondeados y firmes. Para ello te recomendamos la infusión de hinojo. Este vegetal es rico en el compuesto señalado. Para realizarlo en casa solo debes hervir en ¼ de litro de agua una cucharada de semillas de hinojo por 10 minutos. Luego, reposar, colar y beber tres tazas al día.
Otro remedio casero es la clara de huevo. Para usarla, bate una clara hasta que se ponga espumosa, luego aplica la espuma en tus senos, deja actuar por 20 minutos y luego enjuaga bien con agua fría. Un truco que puedes hacer a diario antes de la ducha.
Los ejercicios también son efectivos. Hay movimientos que estimulan la piel y estructura de los senos. Una rutina muy efectiva es ponerse de pie y con la espalda derecha. Luego, procede a hacer brazadas como si nadaras. 5 repeticiones de 15 brazadas interdiarias y notarás los resultados.

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Otro ejercicio es sentarse en una silla y sujetar el asiento con las manos en cada lado. Luego, haz el intento de querer levantar la silla contigo sentada. Mantén la espalda recta y realiza el esfuerzo unas 10 veces por varios segundos. Entrena al menos cuatro veces a la semana.
En cuanto a los hábitos, son varios los que puedes incluir a tu día a día para el beneficio de tu escote. El primero es bañarte con agua fría. Aplicar agua fría a los senos y masajearlos de forma circular en la ducha resulta fabuloso. Otra dato es hidratarlos. Para ello bebe agua suficiente a diario y usa cremas hidratantes en tu pecho. También, es importante no olvidarse del protector solar y de comer de forma balanceada, especialmente alimentos ricos en colágeno.