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Mucho se habla del minimalismo como estilo decorativo o arquitectónico. Sin embargo, pocos se refieren a esta palabra cuando se predica un estilo de vida. Desde hace varios años esta tendencia ha ganado afectos en la población. Incluso, la plataforma Netflix sacó el año pasado una peli-documental sobre el tema, basado en la experiencia de dos empresarios estadounidenses.
Así como en el interiorismo, la premisa del minimalismo en la vida personal aboga por la máxima de “menos es más”. Es decir, vivir con poco, refiriéndonos sobre todo al exceso del consumo. Se trata de una filosofía que invita a desprenderse de lo materialmente innecesario y procurar enriquecer lo personal, las emociones, la salud mental.
Hemos escuchado hasta la saciedad que los bienes materiales no dan la felicidad, pero en la práctica esto dista mucho de ser verdad. El bombardeo publicitario nos hace querer siempre más y más cosas y muchas veces nos sentimos felices con tener el último modelo de auto o de móvil. Y aunque los practicantes acérrimos del minimalismo digan que está mal, no todo es blanco o negro.

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Aquí te contamos los preceptos básicos de este estilo de vida que bien podrías sumar al tuyo sin irse a los extremos.
1.- Deshazte de lo innecesario. Según los minimalistas cada vez que compramos un objeto nos cargamos de un peso emocional. Es por ello que invitan a eliminar esos accesorios poco funcionales que acumulamos en casa. Lo que no se usa, está viejo o roto hay que donarlo, venderlo o tirarlo. Rodearse de espacios libres, nos dará sensación de libertad.
2.- Eliminar las malas compañías. En el plano emocional, también hay que aplicar el deshacerse de lo innecesario y aquí hablamos de personas. No queramos tener un millón de amigos, seguidores o socios a nuestro alrededor. Tener las amistades, parientes y conocidos de calidad (que nos hagan sentir bien y queridas) junto a nosotras es lo más acertado. Hay que ser selectivas. Rodearse de gente afín, productiva y enfocada.
3.- Hogar ordenado y simple. Mantener las cosas en su sitio, todo limpio y prolijo generará un ambiente de paz y tranquilidad en el hogar. Esto no significa que tiene que ser feo o sin personalidad. Hay que darle el verdadero valor a los muebles y detalles que embellecen los espacios y no saturarlos de objetos.

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4.- Agradecer por lo que tienes. El agradecimiento es un valor sumamente poderoso y que ayuda a estar en paz mentalmente. Dar gracias por el trabajo que te provee, por la familia y amigos que te rodea, por los éxitos y logros te ayudará a sentirte bien. Ver los problemas y obstáculos como parte de un proceso de aprendizaje. Agradecer (a Dios, al Universo, al Cosmos o a ti misma) solo por el hecho de estar viva y tener la oportunidad de mejorar tu situación cada día.
5.- Controlar la tecnología y la información. Sabemos que cada vez hay más dispositivos tecnológicos que queremos poseer. Sin embargo, esto está fuera del estilo de vida minimalista. La filosofía invita a simplificar su uso y aglutinar lo más posible en uno o dos dispositivos lo que necesitamos realmente. También, nos aconsejan reducir el consumo de información y noticias. La idea es solo seguir contenido especializado y que nos interese o afecte. En su lugar, te invita a conectar más con la naturaleza y la reflexión en solitario.