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La crioterapia es una técnica muy popular entre los deportistas. Comúnmente, es usada como tratamiento terapéutico en lesiones musculares. Este método consiste básicamente en aplicar frío en zonas del cuerpo. De esta manera se alivian inflamaciones y se contribuye a disminuir los dolores en ciertas lesiones.
En el área estética, la crioterapia también genera múltiples beneficios. El método tiene efectos muy positivos para la apariencia y salud de la piel. Incluso, es recomendada para tratar algunos problemas de la piel como la psoriasis, eccemas o celulitis. En Geneva ofrecen este tipo de tratamiento a su selecta clientela.
A continuación te contamos las técnicas de crioterapia más usadas en centros estéticos:
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1.- Vendas frías. Si deseas reducir medidas en zonas específicas del cuerpo de forma natural y relajante esta técnica es ideal. Consiste en aplicar a la piel vendas que contienen un preparado con sustancias criogénicas y antiinflamatorias. Algunos productos que se aplican con las vendas son extracto de castaño de indias, algas marinas, alcanfor y mentol.
Al someter las zonas deseadas a bajas temperaturas el cuerpo empieza a quemar grasas y elimina toxinas. Además, se reafirma la piel, se suavizan las estrías y se combate la odiada celulitis. Las sesiones suelen demorar unos 40 minutos.
2.- La crioterapia de cuerpo entero. ¿Te animarías a entrar a una cabina y exponer todo el cuerpo a muy bajas temperaturas? En esta técnica se aplica frío intenso (-120°C a -160°C) a todo el cuerpo a través de un criosauna. Pero, tranquila que es por periodos cortos de tiempo (3 minutos). Sin duda los resultados valdrían la pena.
Con esta terapia de frío se consiguen muchos beneficios como por ejemplo quemar de 500 a 1000 calorías por sesión. Igualmente, ayuda a mejorar la circulación sanguínea, lo que contribuye a la eliminación de las varices y favorece el aspecto de la piel.
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3.- La crioterapia facial. La técnica consiste en aplicar bajas temperaturas (-80°C) por medio de un dispositivo a la cara y el cuello en sesiones de 6 a 8 minutos. Con este método tan simple mejoramos la circulación sanguínea, activamos la producción de colágeno y elastina, la cual se va perdiendo con la edad.
Este terapia facial favorece la firmeza y la elasticidad de la piel. ¿El resultado? un rostro más suave, hidratado y firme. Además, sirve para atenuar las ojeras, eliminar manchas, prevenir las arrugas y purificar la piel.
La aplicación de frío de forma adecuada a nuestro cuerpo aporta muchos beneficios estéticos y para la salud. En Geneva conseguirá los mejores especialistas y resultados garantizados.
